La combinación de colores interior y exterior de tu coche significa muchas cosas. Principalmente, es una expresión de lo que te gusta y lo que no. Además de esto, hay muchas ramificaciones asociadas a las combinaciones de colores interiores y exteriores, como la disipación del calor, el valor de reventa y el mantenimiento.
Sí, un coche negro retiene mucho más calor que un coche blanco, pero hay formas de contrarrestarlo. Por ejemplo, si se opta por tintar las ventanas, es probable que se reduzca la temperatura interior de forma significativa, hasta el punto de que un interior de color oscuro no importa realmente.
Tanto el color exterior como el interior juegan un papel importante a la hora de disipar el calor. Un volante de cuero negro, por ejemplo, retiene más calor que uno blanco. Pero si utiliza protección solar para el salpicadero y el volante, no debe preocuparse.
Esto se debe a que una superficie de color brillante refleja mucha más luz/calor, y una superficie de color oscuro no. Es un principio termodinámico. Si no lo crees, sal a la calle con una camisa negra durante el verano, y lo verás.
Principio termodinámico del color
Antes de profundizar en las diferencias entre el interior y el exterior de los coches de color negro y blanco, es esencial que entiendas cómo se aplican las leyes de la termodinámica en esta situación. El color es esencialmente un reflejo de la luz. Más concretamente, un coche rojo refleja todos los »colores» del espectro luminoso además del rojo.
Lo mismo ocurre con el azul, por ejemplo, que refleja toda la luz que no sea azul. Por supuesto, esto no es un tipo de »blanco y negro» (juego de palabras), y estos no son tan precisos. Pero, en general, esta regla se aplica a todos los colores, aparte del blanco, el plateado y el negro, que son algo inconformistas.
Los colores blancos reflejan todo el espectro de luz, los plateados reflejan la mayor parte de la luz y los colores más oscuros, especialmente el negro, absorben todo el espectro de luz. La luz absorbida se transfiere a calor, lo que significa que cuanta más »luz» se absorba, más se convertirá en calor.
Por ello, una superficie de color brillante absorbe menos energía y, por tanto, la superficie no se calienta tanto. Por otro lado, el negro retiene casi toda la energía, lo que hace que la temperatura de la superficie sea mayor. Esto es universal, así que no importa si es una camisa o un coche, estas reglas se aplican.
Propiedades termodinámicas del interior y el exterior del coche
Si sales a la calle con una camisa negra durante el verano, seguro que vas a sentir más el calor que si llevas una camisa blanca. Pero los coches son diferentes porque están hechos de metal, que es un gran conductor del calor. Esto significa que esta regla de la termodinámica afecta a los coches de forma exponencial.
El color del interior no es la única razón por la que algunos coches absorben el calor mejor que otros. Otro aspecto importante es el propio material. El cuero, por ejemplo, es mucho más denso que la tela y, por tanto, absorbe y conduce más calor que un interior de tela.
Si alguna vez te has sentado en un asiento de cuero mientras el coche estaba al sol, seguro que lo has sentido. Si el volante y el pomo del cambio están tapizados en cuero, es probable que se calienten mucho si están expuestos al sol durante un tiempo.
Dicho esto, asegúrate de invertir en un juego de cristales decentes o en una cubierta exterior/interior decente para el coche. Si aparcas tu coche al sol con regularidad, asegúrate de cubrir el salpicadero porque el sol puede dañar la superficie debido a la exposición continua al sol.
El valor de reventa asociado al color interior y exterior del coche
Las personas somos únicas, y a muchos nos gustan muchas cosas. Pero, ¿te has preguntado alguna vez por qué no hay muchos coches de color rosa, naranja, amarillo, azul brillante o verde brillante? Al fin y al cabo, solemos comprar zapatos, camisetas, teléfonos móviles y demás en todo tipo de colores, pero no coches.
En algunas zonas del mundo, como los Emiratos Árabes Unidos, por ejemplo, la gran mayoría de los coches son blancos. Esto se debe en parte al mencionado principio de la termodinámica, pero también al valor de reventa. Cuando llega el momento de vender tu coche, el color importa enormemente, y si pintas tu Focus de color rosa chillón, lo más probable es que nunca lo vendas.
Por eso la gran mayoría de los coches que hay son blancos, negros o grises. A veces te encuentras con un coche rojo o azul, pero suele ser un color más apagado. Aparte de los supercoches, como los Lamborghinis, por ejemplo, la mayoría de los coches son negros, blancos o grises.
Sección de preguntas frecuentes
¿Cuál es la combinación de colores interior y exterior más común?
Si alguna vez te has preguntado cuál es la combinación de colores de coches más común, es la de negro sobre negro. Vale la pena mencionar que la mayoría de los interiores de los coches son negros.
Esto se debe a que la reventa es importante y a que, posiblemente, es lo que mejor se ve. Además, los interiores negros no se reflejan en el parabrisas, mientras que las superficies de colores brillantes sí lo hacen. Sólo un pequeño porcentaje de los interiores de los coches son de color blanco, gris, beige, marrón, crema o rojo.
¿Deberíamos ser más creativos a la hora de elegir el color de nuestro coche?
Sí, definitivamente deberíamos. Los coches no son sólo herramientas, y eso es un hecho. Los coches son un medio de expresión, de estatus y de éxito. También son una forma de darse un capricho por haber cerrado un gran negocio. Además, los coches son un gran compañero de viaje y un banco de recuerdos impagables.
Por ello, deberíamos expresarnos más. Como humanos nos gustan las cosas individuales, las que son y sentimos como »nuestras». Un entusiasta de los coches, por ejemplo, es más probable que pinte un coche de un color poco común que una persona »normal». Pero no te lances a comprar un coche morado y dorado si no eres Snoop Dogg.
¿Y si mi coche no es ni blanco ni negro?
Las diferencias de temperatura entre un coche blanco y uno negro son lo suficientemente notables como para que sean dignas de mención. En cambio, si tu coche es naranja o rojo, o lo que sea, las diferencias de temperatura no son tan notables y, por tanto, no merece la pena mencionarlas.
Sea cual sea el color, hay muchas maneras de mantener tu coche fresco. Una funda para el coche, aparcar a la sombra, mantas en el salpicadero, cristales tintados, cristales monocromáticos… Todas estas técnicas marcan una gran diferencia en cuanto a la temperatura del coche.